Correspondencia enviada a Odília Meireles de Sá, criada de Augusta Vitória

Correspondencia enviada a Odília Meireles de Sá, criada de Augusta Vitória, propiedad del Archivo del Distrito de Oporto.

Régua, 23 de marzo de 1919

Querida Tía Odília,

Espero que esta carta os encuentre de buen humor. Las noticias que llegan por el Duero me llenan el corazón de angustia. Los barqueros dicen que la Gran Enfermedad de España ha llegado de nuevo a Oporto.

Hubo muchas muertes cuando la epidemia llegó a finales de la primavera del año pasado. Si no pueden controlarla, habrá muchas más ahora que hace más frío.

Cuánto me entristece esta noticia, sabiendo que justo el otoño pasado mi segunda madre se marchó a los Paços do Porto, para ser doncella de Su Muy Fiel Majestad, la Reina Augusta Vitoria. Además, si las sospechas que me comunicó en su última carta son ciertas, nuestra reina lleva en su vientre al heredero del trono; no puede arriesgarse ahora a caer enferma.

No quiero gafarlo, pero me temo lo peor y sólo puedo advertirte y apelar a que te protejas lo mejor que puedas. Os ruego que no salgáis de los palacios, donde estaréis protegidos de la enfermedad por las grandes murallas.

Por supuesto, mi afán es injustificado, porque el lugar más seguro para protegeros es la Corte del Norte. Protegerán a la familia real de la peste que asola; es de suma importancia proteger el linaje real. Ahora, más que nunca.

No os descuides. Miel y zumo de limón al menos una vez al día para vigor y salud, y flores en cada habitación para mantener el aire limpio. Y cuide de la reina y del bebé que viene.

Os echo mucho de menos y espero vuestra visita en la época de la cosecha. Estas nuevas cepas para la producción de biocombustible están creciendo a pasos agigantados, Mechnikov tenía razón. Tendrás que venir y verlo usted.

Espero oír de usted pronto, para saber que estáis bien y poder dar un respiro a mi corazón.

Que Dios os bendiga.

De vuestra sobrina,

Alzira Gomes

Esta misiva es el único registro histórico que indica la posibilidad de que la reina Augusta Victoria esperaría un niño en el momento de su muerte.

Apenas tres días después de la fecha de esta carta, la reina Augusta Vitoria murió de gripe española. Odília Meireles de Sá cuidó de Su Majestad durante la enfermedad y acabó contrayendo ella misma el mal. Murió pocos días después y fue enterrada en una fosa común.

Se desconoce si llegó a recibir esta carta de su sobrina.